El carcinoma de células de Merkel (CCM) generalmente comienza en áreas de la piel expuestas al sol, especialmente la cara, el cuello, los brazos y las piernas, pero puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo. A menudo aparece por primera vez como una protuberancia brillante de color rosa, rojo o púrpura que generalmente no duele. A veces, la piel de la parte superior del tumor se rompe y sangra.
Estos tumores crecen rápidamente. Es posible que se propaguen en forma de nuevos bultos en la piel cercana. También pueden llegar a los ganglios linfáticos cercanos (pequeñas colecciones de células del sistema inmunitario en todo el cuerpo). Con el tiempo, los ganglios linfáticos pueden crecer lo suficientemente grandes como para verse o sentirse como bultos debajo de la piel (generalmente en el cuello o debajo del brazo).
El carcinoma de células de Merkel es poco frecuente y puede parecerse a muchos otros tipos más comunes de cáncer de piel u otros problemas de la piel cuando aparece por primera vez. Debido a esto, los médicos por lo general no sospechan de un CCM al principio, y el diagnóstico a menudo se hace solo después de que se realiza una biopsia del tumor.
Es muy importante que un médico revise cualquier bulto, protuberancia o mancha nueva, en crecimiento o cambiante en la piel tan pronto como sea posible para poder encontrar y tratar la causa, si es necesario. Cuanto antes se detecte cualquier tipo de cáncer de piel, más fácil será tratarlo.