El comienzo de un nuevo año es un buen momento para reflexionar sobre los comportamientos pasados e identificar dónde necesita mejorar. Una de las mejores maneras de promover su bienestar general es nutrir la salud de su corazón. Estas son seis medidas clave para asegurarse de que está haciendo lo correcto para la suya en el próximo año:
Conozca sus números
Su colesterol, presión arterial e índice de masa corporal son indicadores de su salud y ayudan a predecir su riesgo futuro de enfermedad cardiovascular. ¿Sabes dónde estás?
Presión arterial óptima: menos de 140/90 mm Hg (o menos de 130/80 mm Hg, si tiene diabetes o enfermedad renal crónica)
Colesterol LDL óptimo: por debajo de 100 mg/DL
El colesterol LDL superior a 160 mg/dL se considera alto. El LDL se llama colesterol «malo» porque contribuye a la formación de placa, que puede obstruir las arterias, causando ataques cardíacos o accidentes cerebrovasculares.
Índice de Masa Corporal óptimo, o IMC: 18,5 a 24,9
Un IMC superior a 25 se considera sobrepeso, mientras que más de 30 se considera obeso. Ambos son factores de riesgo para enfermedades cardíacas. Los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) tienen una herramienta de IMC en línea para ayudarlo a calcular su IMC. Perder solo del 5 al 10 por ciento de su peso actual durante 6 meses reducirá su riesgo de enfermedad cardíaca, según los NIH.
Comprenda su riesgo
Su edad, sexo, raza y herencia afectan la salud de su corazón. Aunque no puedes cambiar ninguno de estos factores de riesgo, hay mucho que puedes hacer con los demás, incluido lo que comes, si haces ejercicio y con qué frecuencia, si fumas y cuánto, cuánto pesas y cómo lidias con el estrés.
Además, Cleveland HeartLab ofrece una puntuación de pruebas de inflamación que le pueden dar a usted y a su médico una imagen más completa de su riesgo de futuros eventos cardíacos.
Levántate del sofá
Hay poco más importante para tu corazón que hacer algo de ejercicio, ya sea jardinería informal, un paseo por el parque o el centro comercial, o un entrenamiento estructurado en el gimnasio. Se recomienda hacer ejercicio 30 minutos al menos cinco días a la semana. Pero incluso si aún no está cumpliendo con ese objetivo, aumentar su actividad física incluso un poco puede reducir su riesgo de enfermedad cardíaca.
Coma para su corazón
Apunte a una dieta principalmente a base de plantas, con muchas frutas y verduras ricas en fibra, fuentes magras de proteínas (pescado y aves de corral sin piel), panes y cereales integrales, nueces y semillas. Limite la carne roja y las grasas saturadas y use sal y azúcar con moderación. Y favorezca las grasas insaturadas, como los aceites de oliva y canola.
Duerma lo suficiente
Escatimar en el sueño aumenta el riesgo de enfermedad cardíaca de varias maneras. La pérdida de sueño conduce al aumento de peso y al aumento de biomarcadores inflamatorios, como la proteína C reactiva (PCR). También se asocia con hipertensión y cambios metabólicos poco saludables que aumentan el riesgo de diabetes, todos factores de riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular. Trate de pasar de 6 a 8 horas por noche para evitar estas consecuencias.
Controle su estrés
El estrés crónico le da a su corazón un doble golpe: No solo promueve las enfermedades cardíacas por derecho propio, sino que también hace que los malos hábitos de salud cardiovascular, como fumar y beber en exceso, sean más probables. En su lugar, cree una rutina que alivie la tensión, que incluya ejercicio, respiración profunda o meditación.
Una vida social rica también ayuda a su salud, y a su corazón, al proporcionar un amortiguador contra los efectos dañinos del estrés. Planee pasar más tiempo con amigos y familiares que lo tranquilicen y agreguen alegría a su vida en 2017 y cosechen este beneficio tan importante.