DIAMBRA MARIANI

LOS HOMBRES GRANDES DE CHIPILO
Chipilo, Puebla, México, 2014
Diambra Mariani y Francesco Mion
Chipilo es un pequeño pueblo mexicano con 4000 habitantes que fue fundado en 1882 por inmigrantes
de la región del norte de Italia del Véneto. Se encuentra en el estado de Puebla.
La mayoría de las personas que viven allí provenían de la ciudad de Segusino, Treviso, pero también de la provincia de Belluno. Por un lado, los venecianos llegaron a México para dejar atrás su pobreza; por otro lado, México necesitaba inmigrantes para repoblar el país después de la Independencia.
Necesitaban personas con habilidades agrícolas, saludables y católicas, y los venecianos se ajustaban perfectamente al perfil; durante los años, desarrollaron sus habilidades en la producción de queso y fundaron
una próspera industria de muebles.
Después de 130 años, todavía hablan un dialecto veneciano y mantienen vivas algunas de las tradiciones venecianas, como jugar a las bochas o, el 6 de enero, quemar una bruja hecha de paja en la plaza principal del pueblo. La mayoría de la gente de esta ciudad tiene apodos que viajan a través de generaciones.
Los habitantes de Chipilo (cipilegni) están muy orgullosos de sus orígenes, pero adquirieron, con los años, muchas tradiciones mexicanas también, y el resultado es una extraña mezcla entre dos culturas diferentes.

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