El desarrollador de un combustible para cohetes espaciales basado en hidrógeno líquido que hizo posibles los vuelos a la luna, Barys Kit, ha muerto a la edad de 107 años. El científico de cohetes bielorruso-estadounidense fue uno de los hombres más viejos del mundo.
Procedente del pequeño pueblo bielorruso de Aharodniki, Kit se convirtió en un científico de fama mundial en el campo de la Astronáutica. Ocupó cargos como Profesor Honorario de la Universidad de Maryland (EE.UU.) y Vicepresidente de la Academia de Astronáutica Internacional Euroasiática. También fue miembro de larga data del Instituto Americano de Aeronáutica y Astronáutica, la Sociedad Interplanetaria Británica y la Academia Internacional de Astronáutica en París.
Kit creció bajo el dominio polaco durante el período de entreguerras, llamando la atención de las autoridades mientras aún estaba en la escuela e incluso fue arrestado como resultado de sus actividades estudiantiles. Se convirtió en maestro de pueblo.
Después de la invasión alemana durante la Segunda Guerra Mundial, fue detenido por una patrulla que transportaba paquetes de alimentos. Después de ser registrado, se encontró que llevaba una serie de pases de viaje alemanes que eran suficientes para condenarlo por su participación en el movimiento de resistencia. Una sentencia de muerte era inevitable
» Pasé 30 días en una prisión alemana», recordó. «Todos los días esperaba la muerte. Fue la Gestapo. Había 30 personas en la celda. Cada mañana, la policía alemana venía y elegía gente al azar para ser fusilada. Sobreviví. 30 veces estaba esperando que la muerte sucediera
Por pura suerte, un antiguo estudiante, Kastus Kasyak, logró asegurar su libertad. Kasyak sería ahorcado más tarde por los soviéticos.
Cuando la guerra llegó a su fin, Kit también fue acusado de colaboración debido a su papel público como maestro de escuela. Él, sin embargo, logró huir, dirigiéndose a amigos en Estados Unidos.
Allí, en una fiesta, conoció a un profesor, Hustau Makshitsky, que logró conseguirle su primer trabajo en ciencias, en North American Aviation.
En 1960, Kit se había convertido en un experto en su campo y publicó el primer libro sobre combustible para sistemas de cohetes, el «Manual de Propulsores de cohetes». Fue rápidamente reconocida como una obra de referencia para la industria y leída en todo el mundo.
Desde 1963 trabajó en la Oficina de Astronáutica de la International Telephone and Telegraph Corporation. Al mismo tiempo, los astronautas estadounidenses se preparaban para volar a la Luna.
Su logro más conocido fue su trabajo con hidrógeno líquido, desarrollando una innovadora fórmula de combustible para cohetes. Fue esto lo que permitió que tuviera lugar el primer vuelo estadounidense a la luna. Se convirtió en la base para la investigación futura de muchos otros científicos.
También trabajó en sistemas de comunicación por satélite para ayudar a las tripulaciones espaciales a mantenerse en contacto con la Tierra.
El nombre de ‘Barys Kit’ se incluyó dentro de una cápsula del tiempo en honor a los científicos espaciales más grandes del mundo, que se construyó en una pared del edificio del Capitolio de los Estados Unidos en Washington DC. La cápsula está destinada a abrirse en 500 años.
Regresó a Alemania en 1972 para estar más cerca de su tierra natal, retirándose a la edad de 82 años.
Kit pasó sus últimos años en un asilo de ancianos en Frankfurt-am-Mein, Alemania. Incluso en los últimos días de su vida podía hablar 4 idiomas con fluidez: Inglés, Bielorruso, Ruso y Alemán. En su pequeña habitación, siempre mostraba una bandera estadounidense, una foto grande de su familia en el alféizar de la ventana y un montón de premios en el estante.
Debido a sus opiniones sobre el gobierno en su país natal, Bielorrusia, su estatus rara vez fue reconocido en los medios de comunicación estatales.
Pero eso no le impidió permanecer positivo sobre la vida,
«No hagas daño a los demás y serás feliz en la vida.»