Estos calambres son contracciones de los músculos de las manos, los dedos pulgares, los pies o los dedos de los pies. Por lo general son breves, pero pueden ser intensos y dolorosos.Los síntomas dependen de la causa y pueden abarcar: Calambres Fatiga Debilidad muscular Entumecimiento, hormigueo o sensación de hormigueo Fasciculaciones Movimientos rápidos, sin propósito e incontrolables Los calambres en las piernas por la noche son comunes en los ancianos.CausasLos calambres o espasmos en los músculos con frecuencia no tienen una causa clara.Las posibles causas de los espasmos en las manos o los pies abarcan: Niveles anormales de electrólitos o minerales en el cuerpo Trastornos cerebrales, como mal de Parkinson, esclerosis múltiple, distonía y enfermedad de Huntington Nefropatía crónica y diálisis Daño a un solo nervio o a un grupo de nervios (mononeuropatía) o a múltiples nervios (polineuropatía) que están conectados a los músculos Deshidratación (no tener suficientes líquidos en el cuerpo) Hiperventilación (hiperrespiración) que consiste en respiración rápida o profunda que puede ocurrir con ansiedad o pánico Aumento de los niveles de fosfato en el cuerpo Calambres musculares, usualmente ocasionados por sobrecarga durante prácticas deportivas o por la actividad laboral Embarazo, con mayor frecuencia durante el tercer trimestre Trastornos tiroideos Muy poca vitamina D Uso de ciertos medicamentosCuidados en el hogarSi la deficiencia de vitamina D es la causa, se deben tomar suplementos de dicha vitamina bajo la supervisión de un médico. Los suplementos de calcio también pueden ser útiles.Estar activo también ayudará a mantener sus músculos relajados. El ejercicio aeróbico, especialmente la natación, y los ejercicios de fortalecimiento también sirven. Pero se debe tener cuidado de no realizar demasiada actividad, lo cual puede empeorar los espasmos.Tomar bastante líquido durante el ejercicio es igualmente importante.