Cualquier evento que implique experimentar o presenciar muerte real o amenaza de muerte, lesiones graves o violencia sexual tiene el potencial de ser traumático. Casi todas las personas que experimentan un trauma se verán afectadas emocionalmente, y hay muchas maneras diferentes en que las personas responderán. La mayoría de las personas se recuperarán rápidamente con la ayuda de familiares y amigos. Para algunos, los efectos pueden ser duraderos.
Las experiencias traumáticas pueden incluir:
- estar en un accidente grave
- ser agredido físicamente
- estar involucrado en una guerra, ya sea como civil o como parte de operaciones militares
- estar involucrado en un desastre natural, como un incendio forestal, una inundación o un ciclón
- ser agredido o abusado sexualmente
Los eventos traumáticos incluyen cosas que le suceden directamente a usted o a alguien cercano a usted. Un evento puede ser traumático si fue testigo de que le sucedió a otra persona o si estuvo involucrado en el curso de su trabajo. Por ejemplo:
- si usted fue el primero en la escena de un accidente grave, o después de un desastre natural
- si se enteró de que un amigo o familiar estuvo involucrado en un evento que puso en peligro su vida, resultó gravemente herido o murió repentina e inesperadamente
Los eventos traumáticos son emocionalmente angustiosos. Si bien la mayoría de las personas se recuperarán por su cuenta, para algunas la experiencia puede conducir a problemas de salud mental como el trastorno de estrés postraumático (TEPT), depresión, ansiedad o consumo de sustancias.
Los eventos traumáticos son abrumadores
Cuando sucede algo traumático, a menudo es abrumador y puede ser difícil aceptar lo que ha sucedido. Es probable que la experiencia sea muy diferente de cualquier cosa por la que hayas pasado antes. Puede significar que cuestionas cosas que siempre has pensado que eran ciertas. Por ejemplo, es posible que ya no creas que el mundo es un lugar seguro, que las personas son generalmente buenas o que tienes el control de lo que te sucede. Cuando la gente habla de que su mundo se ha vuelto patas arriba después de un evento traumático, puede significar que estas creencias generales se han hecho añicos.
Es importante darse cuenta de que el trauma es muy diferente a otros eventos estresantes, como la ruptura de una relación o la muerte de un ser querido por causas naturales. Estos eventos pueden afectar la salud mental de una persona, pero no son los mismos que los eventos traumáticos descritos anteriormente. Reconocer esta diferencia es importante, porque los tratamientos recomendados para ayudar a las personas a recuperarse de un trauma son diferentes a los que se usan generalmente para problemas de salud mental causados por eventos estresantes de la vida.